Relatos de lo excepcionalmente cotidiano

¿Y si tuviéramos marcos de interpretación de la realidad distintos?

domingo, 26 de agosto de 2012

Circunstancias


Lo puto de la vida son las circunstancias…lo que ayer nos acariciaba, hoy nos mata y mañana será pasado. La tristeza de no poder agarrar lo que está pasando delante de ti por no perder lo que has agarrado durante tanto tiempo.
Qué es el tiempo sino lo que borra las lágrimas, pero, qué es la memoria sino lo que nos recuerda que no queremos volver a llorar. Y no puedes dejar de querer que todas las opciones desaparezcan, que te sobre el mundo, pero también las lágrimas que te asoman. La vida son circunstancias y errores. La vida es seguir viviendo y acordarnos de que estamos vivos.
Y aunque quiera desparecer en la oscuridad, erraré de nuevo, por no perder eso que pasa, por volver a sentir eso que siempre me mantuvo viva. Somos nuestras circunstancias, nuestros errores, lo que vivimos, y lo que NO.

viernes, 10 de agosto de 2012

Seamos nosotros.


Flotar en medio del mar,
en medio de la agitación global,
soñar en medio del caos,
planificar a escondidas.

Si el plan tiene fuerza,
y la fuerza es libre,
libre flotará el que desafíe al caos.

Atrevámonos a desafiarnos,
vayamos más allá del plan,
más allá del misterio,
démonos la vuelta y saludemos.

Arriesguemos la duda,
matemos la ansiedad,
dudemos de nuestras certezas,
ejecutemos el deseo oculto.

Quién se quede atrás
que se resigne a mirarse el reflejo,
nosotros miramos de cara,
a la indecisión.

La negrura del abismo,
reflejada en nuestras pupilas
vista en cada espejo,
es la puerta de esta huida.

Nunca fui valiente,
pero la función debe continuar
y más tarde que pronto,
aprendí que yo era mi protagonista.

¿Acaso hay algo más grande que lo que tengo dentro?
¿Acaso ese sueño no soy yo?
¿Acaso no debo ser yo?

Seamos nosotros.

He aprendido...

He aprendido a volar sin alas, a derrapar sin barro, a chocar sin muros, a levantarme sin haber caído. He aprendido que la mayor felicidad puede ser la mayor de las cárceles y, que la mayor desdicha es la mejor de las oportunidades. Los finales felices pueden ser desgraciados y, los errores tal vez sean los finales felices, o los alternativos, o los no contados. Puede el amor hacer de nosotros viles autómatas y puede el desamor concedernos el amor propio. Comprendí que el mejor de los amigos no estaba hecho para mí, o que quizás no existiera, pero descubrí que los malos amigos pueden no serlo tanto. La vida que no viví es la que no me tocaba, las personas que no tengo son las que no necesitaba y los errores que lloré fueron los capítulos de la vida que tenía que vivir.