Relatos de lo excepcionalmente cotidiano

¿Y si tuviéramos marcos de interpretación de la realidad distintos?

lunes, 15 de octubre de 2012

Dudas destructivas


Nunca me atreví a pedirle lágrimas a la lluvia,
a rogarle calor al Sol,
a mendigar el Amor.

Siempre quise la justicia,
como deseé la libertad,
que me dejarán elegir,
que me permitieran errar.

Pude con mucho de lo que quise,
al igual que frustré deseos,
pero ahora que lo tengo,
ahora no sé si es lo que quiero,
ahora no me atrevo,
ahora no puedo no quererlo,
ahora no puedo virar.

Confundo lo que puedo,
con lo que debo,
con lo que se espera de mí,
con lo que quiero.

Podría romperlo todo,
podría destruir el pasado
y, sus fotos por las diagonales,
y, las circunstancias por las personas,
que las crearon… me crearon.

Son las circunstancias, la lluvia,
la música, las ciudades y los demás,
son lo que no soy yo
los que me da miedo dañar.

Es el no ser yo,
el poder y no querer,
lo que hace que calle,
apriete dientes,
deje que me lleve la corriente.

Mataría por una pausa,
un buen acantilado,
dos respuestas y una decisión,
destruir para siempre la palabra inevitable,
evitar el dolor que va a comenzar.

Explotar.